Hace unos cuantos días di una presentación a mis compañeros acerca de los ‘trastornos emocionales’ en el Colegio. Supe desde un principio, que iba a hacer click en varios de ellos: modos, experiencias, socialización, y forma de vida; y así fue.
Pero… primero ¿qué es un trastorno emocional? Se define como trastorno emocional a un patrón psicológico de cuadro clínico que suele aparecer junto con algún malestar, o un entorno enfermizo al individuo. Quedé sorprendida al darme cuenta de que he tenido a compañeros, amigos y gente cercana a mí, que han sufrido alguno de estos. Algunos de estos trastornos, tal como el ‘mutismo selectivo’, que es una falta de comunicación dado por un vínculo roto, se puede eliminar si es tratado a tiempo. Al estar en contacto constantemente, con personas de tu agrado se crea un círculo agradable y saludable.
Éstos últimos años, he estando conviviendo con gente de todo tipo: bravucones, tontos, nerds, gentiles, amargados, sutiles, felices, amigables…de todo. 'Simple clasificación...eh?' No podemos simplemente ir por el mundo señalando a aquellos que no tienen un mismo estilo de vida que nosotros. Cada individuo es libre de pensar, actuar y sentir como quiere. En realidad, solo aquellos que son débiles de mente, carácter y personalidad, son aquellos que se dejan influenciar por otra gente o situaciones. A veces pasamos por algunos momentos de depresión…sin darnos cuenta.
Es decir… ¿cuántas veces nos hemos querido desaparecer de la Tierra, aunque sea un instante? ¿Cuántas veces hemos querido gritar y patear a todo mundo?... ¿Cuántas veces no hemos pensado así? ¡Muchas! ¡Todas!, como diría Chespirito. No hay nada que evite sentirnos así, en un momento determinado. Aunque, claro está, existen factores que a veces determinan si alguien tiene un trastorno emocional. A pesar de que no siempre es así, y es más algunos psicoanalistas aseguran que las causas no pueden ser ni directas ni generalizadas. Puesto que, existen factores redundantes en nuestra vida, que pueden o no marcarnos.
Cuando conocemos a alguien con algún tipo de trastorno… ¿qué hacemos? Corremos. Huimos. Evadimos el tema. Criticamos. Sin saber, que esa persona amarga y retraída ha sufrido algo que ni siquiera uno podría aguantar. Podríamos hacer más con nuestra vida si dejáramos de hablar tanto y empezáramos a pensar un poco más y guardáramos esas pequeñas cosillas que nos gusta decir.
Quizá no lo comprendan, ni lo comprendo, ni lo llegaremos a comprender si no lo vivimos. Pero, tenemos que empezar a hacer algo. Algo bueno…algo que sea suficiente como para saciar todo aquello en nuestra alma que no ha sido bueno del todo… ¿existirá?
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